Cualquier empresa dispone de al menos un socio fundador que es quien se encarga de dar forma a la idea y de empujarla hasta la creación de la empresa. Como todo el mundo sabe, la existencia de socios puede aportar beneficios o ser motivo de grandes conflictos internos. De la experiencia del socio fundador dependerá el que las bases de la empresa se articulen bien desde un principio y nos encontremos en un futuro con la menor cantidad de problemas previstos posibles. No te olvides de contar con el asesoramiento legal de un bufete de abogados especialista en derecho mercantil y laboral para redactar contratos y cláusulas en cualquiera de las fases de creación de la empresa o de contratación laboral.
¿Qué tipos de socios podemos encontrar en una empresa?
Socios Fundadores
Los socios fundadores son personas físicas, jurídicas o instituciones públicas y privadas que patrocinan y apoyan el nacimiento de la Asociación para fomentar los procesos de concentración empresarial y mejora de la profesión de asesoramiento profesional en los procesos de fusiones y adquisiciones de empresa.
Socios Institucionales
Los socios institucionales son cualquier entidad de derecho público o privado interesado en participar en la empresa y en colaborar con el desarrollo del tejido empresarial y productivo español.
Socios Profesionales
Los socios profesionales Son profesionales de servicios relacionados con las operaciones de concentración empresarial, fusiones y adquisiciones tanto en el ámbito empresarial, de asesoramiento, docente o institucional.
Socios Empresarios
Los socios empresarios son todo tipo de sociedades y organizaciones, con independencia de su tamaño, así como empresarios individuales o autónomos, que tengan como objetivo ser más competitivos y productivos, y sean conscientes de la necesidad de ganar tamaño y de contar con un asesoramiento profesional adecuado y de calidad.